Nuevas tecnologías, mismos problemas: mermas de fiabilidad recientes en la industria del automóvil

No es ninguna novedad que los automóviles viven una transición hacia la electrificación, pero las nuevas tecnologías no parece que liberen a los clientes de los viejos y habituales problemas que han asolado o asolarán a una gran parte de los coches con motor de combustión tradicional. Como muestra, dos de los últimos y mayores contratiempos que han sufrido un par de fabricantes de esta industria, aunque en polos opuestos: los problemas del sistema de gestión de las baterías de los coches eléctricos de Hyundai y la misteriosa llamada a revisión de los vehículos Diesel de Opel. Juan Francisco Calero explica ambos casos en su último vídeo.

Si bien parece que, empíricamente, los automóviles modernos son más fiables que los antiguos, hay veces en las que su compra se puede convertir en una pesadilla. Cuando esto ocurre, son los servicios de postventa de las marcas quienes marcan la diferencia a través de su trato, que puede ser cuidadoso, ágil y serio o todo lo contrario. ¿Cómo nos tratan las firmas cuando sus productos tienen problemas de fiabilidad? En este sentido, ¿estamos mejor o peor que en el pasado? A pesar de que los coches son máquinas muy complejas y susceptibles de la obsolescencia programada, los consumidores no deben ser tratados como conejillos de indias jamás.

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