Interior y maletero del Opel Grandland

El habitáculo está dominado por una pantalla central de 16 pulgadas, acompañada de una instrumentación digital de 10 pulgadas. Se mantiene el uso de botones físicos para funciones esenciales. Los asientos delanteros pueden tener calefacción, ventilación y función de masaje. La conectividad es total con Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos.

El Opel Grandland apuesta por un diseño minimalista y funcional, sin exageraciones. No tiene ese toque futurista de Peugeot, pero sí un acabado bien pensado. Los materiales combinan tela en puertas y salpicadero, lo que le da un aspecto agradable y diferente, aunque en las zonas bajas hay más plásticos duros.

Los asientos son cómodos y ergonómicos, con certificación AGR, así que en viajes largos se nota el confort. También hay detalles prácticos como carga inalámbrica para el móvil, dos puertos USB-C y hasta un hueco refrigerado en la consola central para llevar bebidas frescas. El sistema de sonido Focal cumple sin destacar demasiado.

Otro punto a favor es el techo panorámico practicable, dividido en dos partes: una fija y otra que se puede abrir, lo que deja pasar más luz y da sensación de amplitud.

La climatización tiene un detalle curioso: en lugar de las clásicas salidas en el salpicadero, el aire sale desde las puertas. Es un cambio poco común, pero al final te acostumbras.

Multimedia

La tecnología está bien integrada y es fácil de usar. El Head-Up Display es grande y de calidad, algo que normalmente se ve en coches más lujosos. La pantalla central es de 16 pulgadas y está colocada en horizontal, lo que le da un aspecto moderno y organizado.

Eso sí, la pantalla de instrumentación es más pequeña y sencilla que en otros SUV equivalentes, pero cumple con lo básico. Opel ha acertado al mantener controles físicos para el climatizador, así no hace falta navegar por menús para cambiar la temperatura.

En general, el sistema multimedia es completo, con una interfaz clara y bien estructurada. No es el más llamativo del mercado, pero resulta práctico y fácil de manejar en el día a día.

El Grandland tiene un maletero de 550 litros en todas sus versiones, ampliable hasta 1641 litros con los asientos traseros abatidos. También cuenta con múltiples huecos portaobjetos repartidos por el habitáculo con una capacidad total de 35 litros.