Precio y opinión del Renault Espace

El Renault Espace 2023 es un SUV híbrido que ofrece la opción de cinco o siete plazas en un tamaño grande pero no excesivo, 4,72 m. Esto marca un cambio en la carrocería del modelo, que siempre se configuró como coche de siete asientos. A diferencia de las generaciones anteriores, este nuevo Espace abandona el formato de monovolumen que ha estado asociado a su nombre desde 1984 y se une a la amplia oferta de SUV grandes existente en el mercado.

El modelo es más corto y ligero que su predecesor y las primeras unidades se entregarán después del verano de 2023. El equipamiento disponible es muy amplio desde el nivel básico, aunque hay solo tres acabados disponibles, con opciones que afectan al confort y también a la dinámica de conducción, ya que esta generación de Espace puede tener dirección en las ruedas traseras, como ocurría en el anterior. El único motor disponible es híbrido, con 200 caballos y cambio automático. Con este motor el equilibrio general de uso es bueno: corre lo suficiente y gasta poco, aunque lo primero lo hace de forma poco consistente pues el sistema de impulsión a veces es caprichoso con la entrega de potencia.

El confort de marcha es bueno y el aislamiento, también. Dentro, cuatro adultos viajarán cómodamente. Para viajar con más pasajeros la amplitud no es la idónea, ya que las siete plazas son más para uso esporádico que habitual.

Renault sólo ofrece el Espace con un sistema de impulsión híbrido de 199 caballos, formado por un motor de combustión de 131 CV y dos motores eléctricos, uno de 34 CV que sólo sirve para cargar la batería, y otro de 68 CV que puede hacer ambas cosas, cargar la batería y mover el coche. La batería tiene 2 kWh de capacidad, suficiente para garantizar una reserva de potencia eléctrica en conducción normal que no deje sin impulso adicional al motor de gasolina, aunque en ocasiones, cuando se le demanda potencia durante largos periodos, sí que es posible descargarla y perder empuje.

Conducción

Conducir el Renault Espace se parece bastante a conducir el Renault Austral, ya que básicamente se trata del mismo coche con un poco más de longitud. Se nota que es algo menos ligero, pero tampoco hay una diferencia grande en sensaciones. Cuando el Espace va equipado con la opción de eje trasero direccional (es decir, que las ruedas traseras también giran), su efecto es menos perceptible a alta velocidad que en otros coches con este mecanismo, y se hace más patente en maniobras a baja velocidad, donde es una ayuda adicional para tener que girar poco el volante.

Es un coche cómodo en términos generales, bien aislado del ruido y estable. En ningún aspecto destaca por encima de la competencia, ya que si quieres un SUV híbrido de siete plazas más confortable y de precio parecido, te aconsejaríamos el Nissan X-Trail o un Mercedes GLB. Si lo quieres más ágil, probablemente el Peugeot 5008, pero si quieres que esté a la última en equipamiento tecnológico, que disponga de gadgets como la dirección en las ruedas traseras y te gusta la estética del Espace, probablemente cumplirá con tus necesidades en la mayoría de aspectos que son decisivos al comprar un coche.

Dos detalles poco logrados en el Espace son el tacto del pedal de freno y la forma en que su sistema de propulsión híbrido entrega la potencia cuando se pisa mucho el acelerador. En esa circunstancia la aceleración no es homogénea, sino que se intensifica y se reduce suave pero perceptiblemente conforme el coche gana velocidad, como si tuviese baches de potencia. No es algo que interfiera en la conducción, pero genera una sensación extraña cuando hacemos un adelantamiento y a veces se echa de menos un poco más de empuje puntual en esas circunstancias.

El tacto del freno tiene el mismo defecto que el de la mayoría de coches actuales que cuentan con algún tipo de electrificación. Es impreciso y parece que le cuesta parar al coche, aunque en la realidad no sea así. Simplemente hay que acostumbrarse a modular el pedal de freno de una forma menos intuitiva que de costumbre.

Consumo y emisiones

La media de consumo homologado del Renault Espace es de entre 4,6 y 4,8 l/100 km, en función de si tiene cinco o siete plazas y del tamaño de neumáticos con que vaya equipado. Para tratarse de un SUV de siete plazas tiene un consumo muy bajo, más aún si se tiene en cuenta desde el punto de vista de la relación consumo/pasajero. Su competidor directo y más reciente, el Nissan X-Trail, gasta notablemente más, aunque también es más pesado y más rápido pese a tener sólo 14 caballos más.

A la hora de conducir es fácil conseguir un gasto comedido, no tan bajo como la cifra homologada, salvo que se lleve con mucha suavidad, pero sí por debajo de los seis litros sin esfuerzo y al ritmo del tráfico por autovía. En carreteras de doble sentido en las que pueda haber desniveles y adelantamientos, una media de siete litros a los cien es una cifra que puedes esperar si conduces ligero, pero difícilmente más de eso salvo que vayas realmente apurando el motor.

Prestaciones

El Renault Espace tiene unas prestaciones discretas para su peso y potencia, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 8,8 segundos y una velocidad máxima de 175 km/h. La aceleración es correcta y la velocidad punta, pobre, pero es algo generalizado entre los SUV híbridos actuales. Hay SUV de tamaño y potencia parecidas que resultan más rápidos en aceleración, pero ninguno consume tan poco, así que si quieres un SUV rápido, elige otro, y si quieres un SUV que gaste poco, elige el Espace.

Ayudas a la conducción

Las ayudas a la conducción disponibles para el Renault Espace son la mayoría de las que están presentes de serie u opcionalmente entre sus competidores, que le permiten ofrecer un nivel 2 de conducción autónoma (con equipamiento opcional). De serie con el nivel de equipamiento básico (Techno) están incluidos elementos como el control de velocidad, los sensores de aparcamiento posteriores con la cámara de aparcamiento trasera, la alerta de cambio involuntario de carril, los faros con tecnología LED o el sistema de reconocimiento de señales de tráfico, entre otros.

Si optas por un nivel superior o por los paquetes de ayudas (Pack Advanced Driving Assist y Pack Premium City), dispondrás de sistemas como el control de velocidad activo, las cámaras de aparcamiento periféricas, el asistente de aparcamiento o lo que Renault denomina "tecnología de conducción autónoma", que permite mantener el coche centrado en el carril, acelerar y frenar automáticamente adaptándose al tráfico siempre con la supervisión del conductor.

La sensación general que nos ha dejado el Renault Espace durante la prueba de conducción en la presentación internacional ha sido buena, sin que resulte un coche excepcional de aquellos que nos dejan gratamente sorprendidos. Es mejor coche por lo que ofrece en cuanto a practicidad, equipamiento y consumo que por el producto general, en el que algunos detalles están por mejorar, como el funcionamiento del motor híbrido. Probablemente para muchos conductores sea un detalle ínfimo, especialmente si conducen con tranquilidad. El habitáculo ya no es el punto fuerte por modularidad y amplitud que era antaño, pero tampoco la gente busca eso, y Renault sabe darles a cambio una estética llamativa, aspecto de coche robusto y una sensación de seguridad al volante muy elevada.