Etiquetas de la DGT: estos son los distintivos ambientales

Desde 2016 los vehículos han sido clasificados por la Dirección General de Tráfico según su nivel de emisiones y tipo de motor. La eficiencia energética es un criterio de distinción para aplicar determinadas medidas “medioambientales” y la forma de distinguir cada vehículo es mediante etiquetas con colores y letras que se usan para diferenciar los más eficientes de los menos.

Así, las etiquetas de la DGT son un segundo elemento a colocar en el parabrisas junto con la pegatina de la ITV, pero su colocación es voluntaria. Las autoridades tienen acceso a la información del vehículo a través de la matrícula independientemente de si el adhesivo está o no colocado, razón por la que es más habitual verla en grandes ciudades que ya cuentan con Zonas de Bajas Emisiones, que en localidades menores donde la población aún se ve poco o nada afectada por estas políticas de movilidad.

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Qué significan los distintivos ambientales de la DGT

Según la DGT, cuando entró en vigor esta norma en 2016 como parte del Plan Nacional de Calidad del Aire 2017-2019 (Plan AIRE II), el 50 % del parque móvil aproximadamente al que le fue adjudicado este distintivo generaba menos impacto medioambiental que el otro 50 % restante, al que no se le otorgó ningún tipo de etiqueta y que correspondía con los vehículos más antiguos.

Desde entonces el panorama ha ido evolucionando y la proporción de coches con etiqueta ha crecido, razón por la que se valora ya el someter a revisión los criterios, como explicamos más adelante. Aquí tienes un resumen de qué significa cada etiqueta y qué implica.

Etiqueta CERO

De fondo azul, la etiqueta CERO se otorga a los turismos, furgonetas ligeras, vehículos de más de 8 plazas y de transporte de mercancías que hayan sido adscritos al Registro de Vehículos de la DGT como vehículos eléctricos de batería (BEV), vehículo eléctrico de autonomía extendida (REEV), vehículo eléctrico híbrido enchufable (PHEV) con capacidad para circular en modo 100 % eléctrico un mínimo de 40 kilómetros así como también para los vehículos de pila de combustible (FCEV).

Actualmente esta etiqueta implica disponer de la mayoría de ventajas que se ofrecen a la hora de crear restricciones circulatorias o de aparcamiento en ciudad. Son reconocidos como coches con etiqueta CERO desde el Renault Kangoo Z.E. Furgón por ser un vehículo eléctrico hasta el Toyota RAV4 PHEV, pasando por el Hyundai Nexo como uno de los pocos automóviles con pila de combustible de hidrógeno que se venden en España.

Etiqueta ECO

La pegatina bicolor verde y azul ECO ha sido una de las más cuestionadas por la forma en que muchos fabricantes han adaptado gran parte de sus gamas a estos criterios, especialmente gracias a la hibridación ligera. Son expedidas para turismos, furgonetas ligeras, vehículos de más de 8 plazas y vehículos de transporte de mercancías que, según el Registro de Vehículos, hayan sido homologados como vehículos híbridos no enchufables (HEV), híbridos enchufables con autonomía inferior a 40km (PHEV), vehículos propulsados por gas natural (GNC o GNL) o gas licuado del petróleo (GLP) y cumplan las normas Euro de los clasificados con la etiqueta C, la homologación de vehículos híbridos de mínima influencia eléctrica o adscritos a esta clasificación una vez han recibido la instalación de un kit de GLP.

En cualquier caso, son ejemplos de coches con etiqueta ECO desde el Dacia Sandero Stepway ECO-G hasta el Fiat 500 Hybrid gracias a su sistema microhíbrido pero también luce el distintivo verde y azul el Toyota Prius, uno de los pioneros en cuanto a hibridación “autorrecargable”.

Etiqueta C

El distintivo verde con la C lo reciben los vehículos con motor de combustión interna que se ajustan a las normas Euro 4, 5 y 6 gasolina y Euro 6 diésel. Son turismos y vehículos comerciales ligeros con motor de gasolina matriculados desde enero de 2006 y diésel desde 2014. También se distinguen con esta pegatina los vehículos de más de 8 plazas y de transporte de mercancías, independientemente del consumo de de gasolina o gasóleo, con fecha de matriculación indistintamente de su fuente energética siempre y cuando hayan sido registrados en la DGT a partir 2014.

El mercado actual se basa mayoritariamente en modelos con etiqueta C ya que se trata de motores tradicionales que cumplen con las exigencias ambientales. Son desde un SEAT Tarraco 1.5 TSI hasta un Citroën Jumpy Furgón BlueHDi pasando por una infinidad de ejemplos como el Renault Clio con motor de gasolina o el Volkswagen Passat diésel.

Etiqueta B

El distintivo amarillo con letra B se coloca en vehículos antiguos con motores de gasolina matriculadas a partir del 1 enero 2001 o diésel a partir del 1 de enero de 2006. así como los de 8 plazas y de transporte de mercancías, gasolina o diésel matriculados a partir de 2005. Todos cumplen las normas Euro 3 de gasolina o la Euro 4 y 5 diésel.

Cabe la posibilidad y de hecho se da el caso de que un coche esté homologado ya con una de estas normas, pero haya sido matriculado antes de la fecha de validez estipulada. Esto es debido a que muchos fabricantes actualizan sus gamas de motores anticipándose con cierto tiempo a la entrada en vigor de nuevas normativas. En tal caso, se puede realizar el trámite para conseguir la etiqueta B en un coche que no disponga de ella. La mayoría, fabricados en 2000 o incluso en 1999 en caso de ser de gasolina y en 2005 en caso de ser diésel. Hay usuarios que buscan un coche barato con etiqueta B de gasolina o diésel a los que les resulta útil nuestro ránquin de mejores coches con etiqueta B de segunda mano.

Vehículos sin etiqueta (Categoría A)

Esta categoría corresponde a todos los demás vehículos que no cumplen las normativas de emisiones citadas anteriormente, es decir, los de mayor antigüedad del parque móvil, a los que no se les otorga distintivo y por tanto, matriculados antes de enero de 2001 en el caso de ser gasolina y antes de enero de 2006 en los diésel. Sus propietarios son los más afectados por las restricciones de acceso a Zonas de Bajas Emisiones, los aparcamientos regulados lo la circulación en episodios de contaminación como los que se dan en ocasiones en capitales como Madrid.

Cómo conseguir el distintivo ambiental de la DGT

La DGT indica cinco formas de adquirir la etiqueta ambiental, que tiene un coste de 5 euros:

• En las oficinas de Correos o a través de la web de Correos
• En la Red de talleres de la Confederación Española de Talleres (CETRAA) o en otros talleres autorizados
• En gestorías administrativas
• En IDEAUTO, el Instituto de Estudios de Automoción
• En el caso de flotas, se pueden solicitar a Ganvam, la asociación nacional de vendedores de automóviles, camiones y motocicletas

Dónde colocar el distintivo ambiental de la DGT

La etiqueta ambiental de la DGT debe ir adherida al parabrisas en el ángulo inferior derecho en el caso de los coches y en cualquier lugar visible en el caso de las motos. En todo caso, la DGT advierte de que su colocación es voluntaria, a diferencia de la pegatina de la ITV, y sirve fundamentalmente para facilitar la labor de comprobación a las autoridades pertinentes (como policías locales o controladores y agentes de estacionamiento).

Cómo consultar el distintivo ambiental que le corresponde a un vehículo

La DGT dispone de una página web para consultar el distintivo ambiental, en la que comprobar si un vehículo cumple los requisitos para disponer de algún tipo de etiqueta ambiental. Sólo es necesario conocer la matrícula y no es necesario que esté a nombre de la persona que vaya a realizar la consulta, ya que es información de dominio público. Este trámite es gratuito.

Validez temporal y territorial de los distintivos ambientales

Desde su entrada en vigor en 2016 el criterio de, la actual clasificación ha sido revisada y, pese a que lleva vigente varios años, se especula con la posibilidad de que reciba modificaciones en fechas próximas para adaptarla al parque móvil y su evolución. Una de las posibilidades con las que se especula es que se puedan perder los beneficios de las categorías “más contaminantes” conforme estos coches queden más obsoletos, aunque actualmente es pura especulación.

Desde la DGT señalan que los distintivos ambientales son válidos para circular por España, y no tienen validez legal en otros países de Europa que también tienen sistemas de categorización ambiental (como Alemania, Austria, Dinamarca o Francia). En tal caso, la DGT aconseja informarse antes de realizar un viaje por si es necesario adquirir un distintivo ambiental del país a visitar, y de los trámites necesarios para su obtención. En cualquier caso, no es ilegal circular con el distintivo español en el parabrisas fuera del territorio nacional, por lo que no es necesario retirarlo del parabrisas para salir del país.

Cuál es el futuro de los distintivos ambientales

Ante la reforma del etiquetado ambiental de la DGT que desde carwow Juan Francisco Calero ha abordado en uno de sus vídeos, resulta más interesante que nunca conocer las exigencias para que un coche luzca desde una pegatina tan beneficiosa como las azules CERO a otro que sea casi relegado a la legalidad normativa para circular como las amarillas B.

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