¿Has perdido las llaves del coche? No te preocupes, hay solución

En verano es muy habitual perder las llaves del coche. Se trata de una época del año en la que aprovechamos el buen tiempo para hacer actividades al aire libre y movernos más, de forma que las probabilidades de extraviar pequeños objetos que solemos llevar en los bolsillos se incrementan. Es esto por lo que te proponemos un par de soluciones en caso de que el mando a distancia de tu automóvil se quede entre la arena de la playa o la maleza de la montaña, así como una serie de consejos para evitar que ocurra. Todo empieza por mantener la calma y buscar bien por donde hayamos pasado previamente antes de poner en marcha otros recursos.

A por la copia

Cuando nos entregan un coche, especialmente si es nuevo, vienen dos llaves con él: la principal y una copia. En algunas ocasiones son dos mandos a distancia idénticos con espadines integrados y en otras un solo mando a distancia con espadín y otra llave física “de emergencia” sin mando para abrir la puerta del conductor manualmente (todos los coches disponen de esta posibilidad, ya que es un requisito indispensable para su homologación).

Deberemos conocer la ubicación exacta de esa segunda llave o mando para ir a por ello. A veces, resulta más rápido y sencillo avisar a algún amigo o familiar que pueda encontrarlo y traérnoslo. Si estamos lejos de casa, también pueden enviárnoslo por correo urgente. Algunas aseguradoras se pueden hacer cargo de los gastos que conlleva esto (no suele ser barato).

Pasar por el concesionario (y por la caja)

Si no disponemos de una copia de la llave del coche o también la hemos perdido en algún cajón de nuestro hogar, deberemos acudir al concesionario más cercano de la marca de nuestro automóvil. Allí deberemos explicar lo sucedido y presentar nuestros datos personales, la documentación del vehículo y el código de la llave. Si no los tenemos (siempre es interesante llevar esta información en formato digital dentro del teléfono), la operación se puede realizar igualmente, pero nos costará más dinero y tiempo.

Acto seguido, el taller lleva a cabo un duplicado de la llave o del mando a distancia con su espadín. En función del fabricante y de lo moderno o tecnológico que sea el método de apertura y arranque de nuestro vehículo, la factura puede significar desde 50 hasta 500 euros.

Prevenir antes que curar

Para sortear estos imprevistos tan indeseables y prevenir detrimentos en nuestro bolsillo, en nuestro tiempo y en nuestra tranquilidad, deberíamos hacer lo siguiente:

1. Asegurar que tenemos una copia de la llave o el mando y de que funciona bien.
2. Llevar a nuestros viajes los dos juegos de llaves y guardarlos en diferentes lugares.
3. Efectuar una copia de la documentación de nuestro vehículo y tenerla en el móvil.
4. Portar la llave del coche en un sitio cerrado y seguro donde sea difícil que se pierda.
5. Comprar un llavero electrónico para la llave o el mando que nos indique su ubicación.

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