KIA publica las primeras imágenes al descubierto del EV6, su nuevo coche eléctrico
16 de marzo de 2021 de Javier Montoro
Hace unas semanas, KIA adelantó las líneas maestras del diseño de su EV6 a través de unas imágenes de este coche entre luces y sombras. En carwow.es aprovechamos aquella ocasión para hablar sobre sus posibles características técnicas. Tras ese “teaser”, la marca ha revelado recientemente las primeras fotografías al descubierto del que ya es su primer vehículo eléctrico concebido como tal desde cero, a diferencia de lo que ocurre con el KIA e-Niro y el KIA e-Soul, que fueron creados inicialmente como automóviles con motores térmicos. Todavía no se ha anunciado su precio ni su inicio de comercialización, pero se presentará en marzo de 2021.
El KIA EV6 es un turismo sobreelevado de cinco puertas y aspecto coupé, que se construye sobre la plataforma E-GMP, la misma que emplea el IONIQ 5, optimizada para coches 100% eléctricos y con el propósito de crear un espacio interior sobresaliente. Su apariencia general se podría definir como sencilla y futurista. Se basa en elementos estéticos completamente nuevos y que no comparte con ningún otro modelo actual de KIA. Estas características se emplearán en los futuros productos eléctricos de su gama.
En el frontal, dos grandes faros con forma triangular y luces diurnas con patrón dinámico cobran protagonismo a costa de renunciar a la tradicional parrilla “Tiger Nose”. La toma de aire principal se encuentra ahora en la zona inferior, amplia y justo por encima de un faldón delantero que luce un contorno cromado y que se repite alrededor de todo el coche. Según KIA, el flujo de aire se canaliza a través de las lamas de esta calandra y por debajo del suelo plano para conseguir “una aerodinámica óptima”. El capó tiene dos resaltos muy prominentes.
Modelo | Desde | |
Mercedes EQC | 78.600 € | Comparar ofertas |
Audi e-tron | 73.144 € | Comparar ofertas |
Ford Mustang Mach-E | 46.113 € | Comparar ofertas |
BMW iX3 | 65.820 € | Comparar ofertas |
La vista lateral muestra líneas afiladas con bastante tensión, un pliegue inferior que se arquea hacia los pasos de rueda traseros y una caída del techo que recuerda a la de un coupé, dejando una luneta de cristal muy inclinada. Los pilares A, que soportan un parabrisas más plano y uniforme de lo habitual, están pintados en negro, lo cual genera una sensación de cubierta flotante y las manijas de las puertas quedan enrasadas con la carrocería. Finalmente, en la parte de atrás, las aletas posteriores añaden volumen y enfatizan la anchura del automóvil, una percepción a la que también contribuye una inserción negra sobre el pilar C, un alerón superior y unos pilotos LED que se extienden de extremo a extremo.
En cuanto al interior, KIA ha presentado una cabina tecnológica y diáfana, aunque no tan simple como la del IONIQ 5. Está equipada con un volante de nueva horma que luce el nuevo logotipo de la compañía, un cristal curvado que alberga dos pantallas de alta definición, un salpicadero voluminoso que perfilan por debajo unas delgadas salidas de ventilación (con controles táctiles para el climatizador), así como una consola central sin apenas botones físicos y una ruleta para el selector de marchas. Los asientos, en palabras del propio fabricante, son delgados, ligeros y están revestidos con tejidos de materiales reciclados. Promete un alto grado de habitabilidad e innovación.
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