Comparativa: Mercedes GLC frente al Audi Q5, ¿cuál elegir?

En esta comparativa entre el Mercedes GLC y el Audi Q5, tendremos en cuenta las novedades del mercado y nos centraremos en los modelos que están a la a venta a finales de 2022. El Mercedes GLC de tercera generación está a la venta desde el inicio de otoño de 2022 y ha sido completamente renovado. Sus principales novedades frente a la anterior generación son a nivel de equipamiento multimedia, ya que Mercedes ha aprovechado la misma pantalla que lanzó en el Clase C para crear un interior a imagen y semejanza de la berlina. Por fuera es seis centímetros más largo que el modelo previo. Dinámicamente no hay mejoras sustanciales, aunque los consumos han mejorado mucho gracias a la hibridación de toda la gama. El GLC 2022 gana algo de maniobrabilidad gracias, también, a que puede contar con dirección en las ruedas traseras, lo que le dota de mejor capacidad de giro en ciudad y más agilidad en carretera. Todas las versiones tienen tracción integral.

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El Q5 es un “veterano” en el segmento. El modelo actual fue lanzado en 2017, por lo que se aproxima a los siete años de vida comercial que suele tener un coche en el mercado antes de ser sustituido. En 2021 fue puesto al día con ligeros cambios estéticos, mecánicos y de equipamiento. Donde más se le nota el paso del tiempo frente a sus competidores es en el habitáculo, porque su sistema multimedia cuenta con una pantalla “pequeña” para los estándares actuales, y hay aún una presencia notable de botones físicos. A nuestro juicio esto no es una desventaja, sino todo lo contrario: es uno de los pocos coches del segmento de lujo en los que todavía no hay que pelearse con una pantalla táctil para controlar algunas funciones básicas. La gran baza del Q5 es una calidad de acabados interior por encima de su competencia.

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Dimensiones exteriores

El Mercedes GLC mide 4,72 m de longitud, 1,89 m de anchura y 1,64 m de altura. Su distancia entre ejes es de 2,89 metros. Las medidas del Audi Q5 son 4,68 m de longitud, 1,89 m de anchura y 1,64 m de altura. Tiene una distancia entre ejes de 2,82 metros. Son coches con un tamaño muy parecido, exclusivamente diferenciados por los seis centímetros extra del GLC y su mayor batalla, que a priori debería beneficiarle en espacio disponible para las piernas en la segunda fila de asientos, pero en la práctica no sucede así.

Maletero

Donde verdaderamente se nota ese extra de longitud que tiene el GLC es en el maletero, que aventaja claramente al del Q5 tanto en las versiones con hibridación ligera como en las híbridas enchufables (PHEV), que son siempre las variantes que peor paradas salen porque el alojamiento de la batería de gran capacidad resta volumen de carga. El Mercedes GLC tiene 600 litros de maletero en las versiones con hibridación ligera y 470 l en las híbridas enchufables. El Audi Q5 tiene 550 litros en el caso más favorable, y 465 l en las versiones PHEV.

Medidas interiores y habitabilidad

El Audi Q5 es un poco más amplio en anchura interior que el GLC al nivel de los hombros de los pasajeros, con dos centímetros más de cota. Es, quizás, el detalle que más llama la atención al subir al Audi, la buena sensación de amplitud que genera y que permite usar el apoyabrazos central delantero sin tocar codo con codo entre ambos ocupantes. A esta sensación también ayuda que el túnel central es menos voluminoso que en el Mercedes y los pasajeros tienen un espacio más diáfano delante.

La altura disponible es prácticamente idéntica en la fila delantera en ambos coches, y no hay problema con personas altas, que no se verán pegados al techo si colocan el asiento en la posición más baja. En la fila trasera la diferencia en altura sí es notable y juega a favor del GLC, que ofrece siete centímetros más. La distancia disponible entre la primera y la segunda fila es similar en ambos coches (hay un centímetro más en el GLC, una diferencia simbólica) y, aunque en ambos casos es una cota normal que no plantea problemas para ir cómodo, ninguno de los dos SUV destaca por ofrecer una cota generosa detrás en relación al tamaño de su carrocería. En este sentido, llama la atención que un modelo más pequeño y barato como el Hyundai Tucson ofrezca cinco centímetros más de espacio para las piernas atrás.

Equipamiento

En lo relativo al equipamiento disponible, el del GLC puede ser algo más amplio gracias a que ha llegado mucho después al mercado y Mercedes-Benz ofrece una serie de servicios con la conexión de datos de Mercedes Me y el sistema multimedia MBUX. Hay elementos como el Paquete ENERGIZING Plus del GLC que están orientados a generar una atmósfera de confort entre el sistema de masaje de los asientos, la iluminación, el climatizador y el equipo de sonido, cosa que en el Q5 no está disponible.

Los dos coches tienen de serie un cuadro de instrumentos formado por una pantalla de gran tamaño, y lo que difiere es el tamaño de la pantalla multimedia, que en el Audi Q5 va situada en la parte superior del salpicadero y puede ser de hasta 10,1 pulgadas, mientras que en el GLC ocupa de serie toda la consola central gracias a sus 11,9 pulgadas en configuración vertical.

En los asistentes a la conducción, ambos coches pueden tener todo lo necesario para conseguir un nivel 2 de conducción autónoma avanzada. En el Mercedes son de serie más cantidad de asistentes, como el de ayuda al aparcamiento, el de cambio automático de luces largas y cortas, el que evita que te salgas involuntariamente del carril o la cámara de visión trasera (que es el sistema básico, ya que ambos pueden tener un equipo de cámaras que graba los 360 grados alrededor del coche).

La calidad de acabados es claramente mejor en el Audi Q5 que en el Mercedes GLC. No porque la del Mercedes sea baja, que tampoco es el caso, sino porque la factura de Audi es excelente y los detalles de ajuste y los materiales están particularmente bien cuidados. Mercedes ha abusado en los últimos tiempos de las superficies de plástico duro, a las que da un aspecto sofisticado, como en la consola central, pero que no logra hacer que aparenten la solidez que sí transmiten los plásticos del Audi. Igual ocurre en otras zonas menos a mano, como la parte baja de las puertas. Los botones y mandos del Audi también ofrecen un tacto más sólido, como de coche “que vale lo que cuesta”, mientas que en el Mercedes hay que pagar el tributo de tener una gran pantalla táctil que hace que los ojos de quienes invitamos a subir se vayan directamente a su llamativo aspecto.

Motor y prestaciones

La oferta de motores es un poco más amplia en el Audi Q5 que en el Mercedes GLC, si bien es previsible que la del Mercedes crezca conforme avance el tiempo, ya que su gama es la de lanzamiento, que siempre suele ser reducida. El Audi se puede adquirir en su versión básica diésel con tracción delantera, y el resto de la gama sólo está disponible con tracción integral quattro. El Mercedes GLC, desde la versión de acceso, que es más cara y potente, tiene siempre tracción total 4MATIC.

El Audi Q5 se puede elegir con seis sistemas de propulsión. Hay tres motores diésel, siempre con hibridación ligera: 35 TDI, 40 TDI y SQ5 TDI, con 163, 204 y 341 caballos; un motor de gasolina con hibridación ligera: 45 TFSI de 264 caballos; y dos variantes híbridas enchufables, ambas asociadas a un motor de gasolina, con 62 y 60 km de autonomía eléctrica,: 50 TFSIe y 55 TFSIe, con 299 y 367 caballos, respectivamente.

El GLC se puede adquirir con cinco sistemas de propulsión. Dos diésel: 220 d y 300 d, con 197 y 269 caballos; dos gasolina, 200 y 300, con 204 y 258 caballos; y un híbrido enchufable de gasolina, denominado 300 e, con 313 caballos y una autonomía eléctrica homologada de hasta 130 km. Más adelante llegarán las variantes híbridas enchufables más potentes, una asociada a un motor diésel, con 333 caballos, y otra de gasolina con 381 CV.

Las prestaciones de ambos modelos son parecidas si se comparan versiones equivalentes. El TDI básico del Audi Q5 se queda algo más descolgado en aceleración, pero sigue siendo un coche perfectamente válido para que una familia viaje confortable con su equipaje y el coche cargado sin echar de menos más potencia.

Consumo

El consumo de combustible es más bajo en el Mercedes GLC que en el Audi Q5, a semejanza de potencia y sistema de propulsión. Por ejemplo, el Audi de gasolina de 265 caballos, con denominación 45 TFSI quattro-ultra S tronic, tiene tracción integral y una media homologada de 84, l/100 km, mientras que el GLC 300 e 4MATIC, con 258 caballos y también tracción total, tiene un consumo medio homologado de 7,4 l/100 km.

Conclusión, ¿cual me compro?

Ambos SUV tienen las características propias de los coches de su precio: son refinados, tienen buenas prestaciones desde las versiones básicas, un consumo razonable que no se ve penalizado por un peso excesivo y unas reacciones seguras en las que prima el confort sobre la agilidad. Si lo que te gusta es tener un tacto de conducción un poco más directo y ágil, nuestro consejo es que te orientes hacia las versiones “deportivas” del GLC, es decir, que lo puedes equipar con accesorios AMG para darle más rigidez de suspensión, y con llantas de hasta 20 pulgadas (que no son lo mejor de cara al confort). Si además optas por el “Paquete de conducción dinámica”, que conlleva el eje trasero direccional y la suspensión neumática, tendrás algo más cercano a un turismo en reacciones, aunque nunca realmente comparable a la eficacia de un Mercedes Clase C.

Si por el contrario tus deseos van más orientados hacia el confort y el silencio de marcha, entonces nos parece mejor opción el Audi Q5. Primero porque, en general, transmite una sensación de solidez y de “coche bueno” un poco mayor que el Mercedes, que con la rebaja en calidad interior se siente más “plasticoso”. Segundo, porque el aislamiento acústico nos parece más cuidado, aunque Audi ha renunciado también a seguir apostando por los motores de seis cilindros en su gama media, y sólo la ofrece ya en el SQ5, que es la versión más potente y deportiva y que cuesta casi 85.000 euros. La suspensión del Q5 también trata un poco mejor a los ocupantes, en el sentido de que filtra particularmente bien las irregularidades del asfalto y los pequeños resaltos y badenes del extrarradio de las ciudades. Además, si quieres darle un toque deportivo, Audi también ofrece equipamiento al efecto.

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