A igualdad de motorización el más “barato” de los tres es el Mercedes Clase A con 26.525 euros, aunque también hay que reconocer que su motor gasolina 180 es el menos potente con 122 CV.

Después está el BMW Serie 1 118i de 140 CV con 28.800 euros, este motor gasolina de origen Peugeot es tricilíndrico y tiene un comportamiento muy correcto. Habrá que esperar a una futura versión 116i que rebaje ligeramente el precio de entrada.

En el Audi A3 Sportback tenemos un precio de 29.070€ para el motor 35 TFSI de 150 CV, aunque se espera la llegada de una versión de acceso con el 30 TFSI que baje algo más el precio del modelo.

Diseño y medidas

En el apartado estético es muy difícil, por no decir imposible, extraer diferencias objetivas entre nuestros tres protagonistas. Si podemos decir que los tres cuentan con una imagen actual, puesto que ninguno lleva en el mercado más de dos años con su actual generación.

Quizás el Mercedes Clase A es el más clásico de los tres, con formas algo menos musculosas y redondeadas. En el término medio se encuentra el Audi A3 Sportback, a pesar de que incorpora unos parachoques delanteros con formas similares a los que hemos podido ver en los últimos modelos deportivos de la marca.

El BMW Serie 1 es el que más cambia estéticamente respecto a su anterior generación. Quizás este cambio notable se debe a un frontal totalmente actualizado que incorpora una gran calandra. Es el modelo con líneas más agresivas y marcadas para dejar claro desde el principio su carácter dinámico y deportivo.

Hay que tener en cuenta que cada uno de los tres modelos puede cambiar ligeramente su imagen en función del acabado elegido, ya que todos ofrecen líneas estéticas más orientadas al lujo o a la deportividad.

En las medidas sí podemos encontrarnos con diferencias objetivas ya que llega a haber una diferencia de longitud de hasta 10 centímetros. El modelo más pequeño es el BMW Serie 1 con 4,31 metros de largo, le sigue el Audi A3 Sportback con 4,34 metros y el Mercedes Clase A con 4,41 metros.

En lo que ancho y alto se refiere volvemos a la paridad con una anchura que ronda el 1,80 m y una altura en torno a los 2,70 m, siento es Audi A3 Sportback ligeramente más ancho y bajo que sus rivales. Curiosamente los maleteros también son muy similares con 380 litros para el Serie 1 y el A3 Sportback y 360 litros para el Mercedes Clase A.

Motorizaciones

Aunque habrá que esperar para ver cómo evolucionará la gama de motorizaciones de estos modelos a lo largo de su vida comercial, lo cierto es que actualmente hay diferencias evidentes entre estos tres coches.

La oferta de motores más completa es sin duda la del Audi A3 Sportback, ya que cuenta con propulsores diésel y gasolina, así como opciones microhíbridas e híbridas enchufables. Esto le permite obtener los tres distintivos medioambientales de la DGT: C, ECO y CERO.

Uno de los puntos fuerte del A3 Sportback es que ofrece en sus motores gasolina tecnología microhíbrida, esta consiste en un sistema eléctrico de 48 V que alimenta a un pequeño motor eléctrico acoplado al motor de combustión, lo que permite que el consumo se vea ligeramente mejorado y se obtenga la etiqueta ECO.

Al igual que su anterior generación el nuevo Audi A3 Sportback también contará con una versión híbrida enchufable que esté alrededor de los 50 kilómetros de autonomía en modo 100% eléctrica. Esto, además de permitir ahorrar un considerable ahorro de combustible, es motivo suficiente para obtener la etiqueta CERO de la DGT.

En segundo lugar, encontramos al Mercedes Clase A, que ofrece también una versión híbrida enchufable que obtiene la etiqueta CERO de la DGT. La principal diferencia con el Audi es que sus motores térmicos no obtienen microhibridación y por tanto no cuentan con la pegatina ECO.

El más rezagado de los tres actualmente es el BMW Serie 1, ya que no ofrece ninguna variante electrificada, por lo que con sus motores diésel y gasolina únicamente puede obtener la etiqueta C de la DGT.

Tecnología

En este apartado consideramos vencedor justo al Mercedes Clase A. Es evidente que nuestros tres protagonistas tienen una gran cantidad de sistemas que dejan claro que nos encontramos ante modelos de corte ‘premium’, pero hay diferencias.

El asistente de voz del Mercedes Clase A marca la diferencia al tener un tiempo de respuesta más rápido y sobre todo ser capaz de entender los comandos de varias maneras distintas. De esta manera, sí nos parece un elemento que en el día a día pueda aportar un valor positivo a la conducción.

El sistema de BMW también puede activarse por voz mediante el comando ‘Hola BMW’, pero tenemos la sensación de que la respuesta es más lenta y los comandos deben formularse de una manera muy concreta para que el sistema no tenga problema en reconocerlos.

El Audi A3 Sportback se queda algo retrasado en este aspecto, puesto que a pesar de contar con una pantalla táctil de tamaño generoso no tiene un asistente personal que se pueda activar con la voz y resulte útil con expresiones naturales. También echamos en falta un mando físico que permita interactuar con el sistema sin tocar la pantalla, algo que sus dos rivales sí emplean.

En los asistentes a la conducción apenas encontramos diferencias entre estos modelos, ya que los tres pueden incorporar sistemas de conducción semi-autónoma muy avanzados, entre los que destacamos sin duda en control de crucero adaptativo y el sistema de centrado de carril.

Conclusión

Nos encontramos ante tres modelos realmente completos y que llevan tantos años en el mercado que han sabido solventar sus puntos débiles, por lo que su único punto criticable es el precio y la falta de equipamiento de serie.

En este tipo de vehículos muchas veces la decisión final depende de la imagen de cada marca y la afinidad que el futuro conductor tenga con esta. Nosotros recomendamos el BMW Serie 1 si buscamos un comportamiento más deportivo, para todo lo demás cualquiera de los tres modelos es una buena elección.