¿Debemos montar los neumáticos nuevos delante o detrás? El error que comete la mitad de los conductores

A medida que vamos adquiriendo experiencia y vamos conduciendo más a menudo, nos vamos encontrando con diferentes costumbres, teorías y errores muy comunes que se toman por verdaderos “desde siempre” pero que en algunos casos pueden comprometer el estado de nuestro vehículo e incluso nuestra seguridad. Y uno de estos mitos está en los neumáticos.

Y es que existe un error generalizado entre los conductores a la hora detener que montar un nuevo par de neumáticos y dejar otro todavía aprovechable en el coche: La falsa creencia está en que los nuevos deben ir en el eje delantero, cuando en realidad deben colocarse siempre en el trasero. Este desconocimiento no solo afecta a conductores particulares, sino también a profesionales del sector, lo que supone un riesgo en la seguridad vial.

¿Por qué los neumáticos nuevos deben ir detrás?

Según expertos en neumáticos, la prioridad a la hora de cambiar gomas no es mejorar la tracción o la frenada, sino garantizar la estabilidad del vehículo en línea recta. La recomendación de la industria es clara: los neumáticos con mejor estado deben situarse en el eje trasero, independientemente de que el coche tenga tracción delantera (FWD), trasera (RWD) o total (4×4).

Cuando los neumáticos más desgastados se colocan atrás, el vehículo es más propenso a perder el control en curvas o sobre superficies deslizantes, provocando sobreviraje (cuando la parte trasera se desliza). En cambio, si los neumáticos más nuevos están en el eje trasero, el coche mantiene una respuesta predecible y más segura.

Diferencias entre tipos de tracción

Esta recomendación es válida para cualquier tipo de tracción. Aunque algunos puedan pensar que en un coche de tracción trasera los neumáticos nuevos deberían ir en ese eje por motivos de agarre, los estudios demuestran que, en situaciones límite, la estabilidad es más importante que la tracción.

Incluso en vehículos 4×4, donde la potencia se reparte entre las cuatro ruedas, la adherencia en el eje trasero sigue siendo clave para evitar una pérdida de control repentina.

Pruebas en circuito: los efectos de una mala elección

Para comprobar estos efectos, se realizaron pruebas con tres coches idénticos equipados con neumáticos en diferentes condiciones:

• Neumáticos nuevos en el eje trasero y usados en el delantero.
• Neumáticos nuevos en el eje delantero y usados en el trasero.
• Un solo neumático nuevo en la rueda delantera derecha, con el resto desgastado.

Los resultados fueron contundentes. En la primera configuración, el coche mantuvo un comportamiento predecible, con una ligera tendencia al subviraje (cuando el coche se va de frente), fácilmente corregible soltando el acelerador.

En la segunda configuración, con neumáticos nuevos en el eje delantero, la estabilidad desapareció. Al aumentar la velocidad en una curva mojada, el eje trasero perdió agarre de manera brusca, provocando un sobreviraje difícil de controlar.

En la tercera configuración, con un solo neumático nuevo en una rueda delantera, los resultados fueron aún más alarmantes. Dependiendo de la dirección del giro, el coche reaccionaba de manera opuesta: en un giro a la derecha, la respuesta era estable; en un giro a la izquierda, la diferencia de agarre entre neumáticos generaba una pérdida de control repentina e impredecible.

Diferencia entre subviraje y sobreviraje

El sobreviraje es una situación peligrosa porque la mayoría de los conductores no está entrenada para reaccionar correctamente. Puede ocurrir al esquivar un obstáculo de manera brusca o al frenar en una curva mojada, y su corrección requiere reflejos y experiencia.

En cambio, el subviraje, que es lo que ocurre cuando las ruedas delanteras pierden agarre primero, es más fácil de controlar. Por eso, colocar los neumáticos nuevos en el eje trasero reduce los riesgos y mejora la seguridad.

¿Qué hacer al cambiar neumáticos?

Siempre que se sustituyan dos neumáticos, los nuevos deben ir en el eje trasero y los usados, en el delantero. Si los delanteros también están en mal estado, lo recomendable es cambiar los cuatro al mismo tiempo.

A pesar de que algunos talleres pueden sugerir lo contrario, esta recomendación está respaldada por pruebas y estudios que demuestran que mejora la estabilidad del coche y reduce el riesgo de accidentes.

Y recuerda que si no solo quieres cambiar los neumáticos de tu coche, sino que quieres cambiarlo por uno nuevo, siempre puedes hacerlo a través de Carwow.es

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